Construcción de paz y políticas de seguridad
Introducción
La Organización Comunitaria por la Paz, A.C. (OCUPA) tiene como misión la construcción de un México en paz. Se especializa en la prevención del delito y en identificar y abordar las raíces que alimentan la violencia, trabajando para reducir los factores de riesgo que propician la comisión de ilícitos.
Nuestro enfoque considera que una construcción de paz debe diferenciarse de las políticas de seguridad, entendiendo que se trata de un proceso mucho más complejo. Esto implica no solo resolver las causas estructurales del conflicto, como el prohibicionismo y las desigualdades sociales, sino también trazar diversas rutas para evitar que las violencias en nuestro país se repliquen y escalen aún más.
Desde nuestra perspectiva, un gobierno feminista debería asumir que la violencia tiene sus raíces en la crisis de cuidados, especialmente hacia las infancias y juventudes. Una estrategia de seguridad sin vinculación con los cuidados, entendidos estos como acciones dirigidas al bienestar y a la prosperidad de la vida, está incompleta, ya que las violencias que no se intervienen se replican.
Propuestas
En nuestra propuesta de agenda insistimos en que la mejor forma de interrumpir los círculos de violencia es implementar estrategias diferenciadas de prevención, así como gestionar los impactos del narcotráfico en las comunidades que han sido gravemente afectadas por los delitos de alto impacto. En este sentido, consideramos que la prevención es un asunto de cuidados integral, transversal y especializado. Desde OCUPA hemos trabajado en la creación de modelos de atención psicosocial e intervenciones terapéuticas con personas liberadas de prisión, fomentando así su reinserción social y previniendo la reincidencia. No obstante, estamos convencidos de que, sin corresponsabilidad en los cuidados del Estado, las empresas y la sociedad, no hay reinserción social ni prevención del delito posible. La apuesta por una construcción de paz debe contemplar los cuidados como un aspecto central de la vida, es decir, de las personas, sus comunidades y sus necesidades específicas.